Diez cucharadas de arena

Las cosas no son siempre fáciles, mucho menos en una relación a distancia. Digamos que si las relaciones son complicadas por si solas, cuando le agregamos distancias se multiplica por diez. Siento que nos precipitamos por miedo a perderlo todo y ahora no se si esto es lo que quiero por el resto de los próximos cinco años. Me gusta estar con esta persona porque me hace muy feliz, pero siempre pido mas de lo que estan dispuestos a dar. Indudablemente soy yo la que tiene un problema, pero es como si me ahogara en mi propio vaso de agua y eso me gustara.

Tiendo a sentir que son las personas correctas pero no en el momento correcto ¿Porque no podía aparecer dentro de otros cinco años cuando todos mis objetivos personales estuviesen cumplidos? Al mismo tiempo pienso que este verano con esa persona fue hermoso, podemos entender entonces que las distancias son una prueba muy grande para las parejas y que superarlas es como comer una cucharada de arena todos los días. 

Soy de esas personas que creen que cuando encontramos el amor, debemos aferrarnos a el con todas nuestras fuerzas, y que dure lo que tenga que durar. Por mas que dure solo un mes, una semana o una noche, valió la pena porque fue real ¿Que sentido tiene estar sola y que cada vez que estés con una persona sea algo vació? Donde solo lo hacemos por rutina o necesidad. Obvio que con este pensamiento corro el riesgo de sufrir por amor constantemente, pero supongo que eso es estar vivo.