Hay dias mas largos que otros, llenos de ansiedad y dolor, pero son viejas compañías que siguen mis pasos a donde voy. Algunas veces se hacen mas presentes, como quien abraza con mas fuerza, otras son un susurro antes de irme a dormir, un escalofrió al corazón. Las dudas me acarician el pecho, el miedo ante tanta oscuridad, en tiempos tan desesperados. Cuales verdades son las que importan? Debo elegir unas sobre otras? Acaso no puedo tener las dos? Debo si o si sacrificar una cosa por la otra? Siento miedo del que diran, que duden sobre lo que diga, de la verdad que atraviesa mi corazon. Un choque de convicciones, siempre hay que denunciar las injusticias, la violencia, la maldad. Pero hoy se que el precio de hablar, de señalar con el dedo a quien daño produce, es exponerte a ser señalada. Tengo miedo de que inventen mentiras respecto a mi verdad, que busquen falsas excusas, cuando lo unico que quiero es que me pidan perdon, quiero creer que esa persona puede cambiar y reconocer la violencia con que me ultrajo. Quisiera creer que realmente puede ver el dolor ajeno y ver las consecuencias de sus acciones, lloro en silencio mientras la ducha tapa mi voz quebrada al rememorar ese dia, al entender que no fue solo esa vez, fueron varias; lloro porque tengo miedo de no recordar todo, que algunas cosas queden en la oscuridad de mi inconsciente, lloro porque nadie entiende mi dolor sin mirarme con lastima. Lloro al ver en la sombra que me converti en comparacion con la grandeza de mi yo anterior. Lloro porque a pesar de que todos los dias duele, mi alma prefiere recordar antes que olvidar. Lloro porque tengo miedo a amar y sin embargo mi corazon implora el palpitar desenfrenado del amor. Lloro hasta que los ojos quedan secos de dolor, hasta que el pecho es solo un peso muerto y mi mente un torbellino que solo quiere desaparecer.
Es la ansiedad, el miedo y el dolor los que todos los dias duermen en mi cama, cuando solo anhelo la calidez de un cuerpo amado, de caricias suaves y una boca que sepa devolverme el aliento que en cada rincon oscuro se corta. Sueño con un amor que me devuelva la capacidad de amar, de creer en aquello que siempre movio los mecanismos de mi ser, el amor puro y real. Deseo un amor que me demuestre que todo se puede, que la vida es justa y el amor dado siempre vuelve. Un amor que derrita el frio que hay en mi pecho, desanude el dolor de mi gargante y rebalse mis ojos de amor, ese que calienta hasta los pies mas frios en invierno.
Anhelo creer denuevo en el amor.